Cáceres registra una media de cinco muertes violentas al mes

Los forenses del anatómico investigan tanto las muertes violentas, en las que se incluyen los accidentes, homicidios y suicidios, como aquellas que son sospechosas de criminalidad, es decir, aquellos casos en los que se desconocen los antecedentes y que una vez investigados se determina si han sido muertes por causas violentas o naturales.

Así, la memoria 2003 del instituto anatómico cacereño --comprende los partidos judiciales de Cáceres y Valencia de Alcántara-- recoge que los forenses investigaron durante el pasado año un total de 65 muertes --dos menos que en el 2002--, de las que 51 --tres más que en el anterior-- fueron muertes violentas y 13 fueron por causas naturales.

LIGERO ASCENSO Fueron los homicidios y suicidios los que hicieron que las muertes violentas experimentaran en el 2003 un ligero ascenso con respecto al 2002, pues los primeros pasaron de uno (el de Aldea Moret) a tres (los dos de Miajadas y el de Valencia de Alcántara), y los suicidios de 14 a 16. Las muertes accidentales, por su parte, bajaron de 33 registradas en el 2002 a 32 el año pasado. De éstas últimas la inmensa mayoría (26) se produjeron en accidentes de tráfico.

El director del Instituto Anatómico Forense, José María Montero, destacó el hecho de que la actividad del instituto se mantiene bastante estabilizada en los últimos años, pero con una línea descendente, "algo muy importante, pues mientras que hace años las muertes investigadas estaban en torno a las 100, en los últimos años se mantienen en torno a las 60".

Reconoció, no obstante, que le preocupa la cifra de muertes suicidas, y más aún "que vuelvan a incrementarse, ya que tras el importante descenso que se produjo entre el 98 y el 99, bajando de 26 a 10, desde el 2000 el número de casos ha ido en aumento".