El cambio de horario de la tradicional procesión de Las Candelas animó ayer a la participación de los cacereños. Por vez primera la festividad de la Candelaria se celebró por la tarde y no por la mañana como venía siendo habitual. La decisión se produjo después de que el año pasado las mujeres de la barriada lo solicitaran al párroco titular de San Mateo, Paulino Hernández, que ayer por cierto estaba muy satisfecho por la elevada asistencia.
La ermita de la Consolación o las Candelas data del siglo XVI y fue restaurada en 1957. Dependiente de la iglesia de San Mateo, cada 3 de febrero es costumbre sacar en procesión a la talla de Las Candelas. El origen de la celebración se remonta al siglo XIII y se basa en rendir tributo a la madre de Cristo portando en la mano candelas (en el caso de Cáceres se llevan velas), previamente bendecidas.
En torno a las cinco de la tarde la procesión salió de la ermita. La imagen la portan las mujeres. La presidió Paulino Hernández. Acudieron la concejala de Asuntos Sociales, Marcelina Elviro (PSOE) y Candi Bello, Joaquín Rumbo, Guadalupe Díaz y Luis Fernando Gallego por el PP.
A la llegada a Santa Clara se hizo la suelta de palomas y en San Mateo el padre Ramón ofició la misa. En el transcurso de la misma se anunció que el año que viene, por vez primera y para potenciar la fiesta, los padres que lo deseen podrán ofrecer a la Virgen de las Candelas a los niños que hayan nacido este año. Por otro lado, la fiesta de San Blas continúa su actividad. Por la mañana acudieron colegios y hoy a las 13.30 será la misa de los otorrinolaringólogos y por la tarde, procesión del santo.
