El ascensor de Obispo Galarza, una de las principales actuaciones del segundo Plan E, no podrá salir a licitación al menos hasta la segunda quincena de septiembre. La razón es que la reforma que aconsejó la comisión de seguimiento del Plan Especial --cambiar de ubicación la torre del ascensor, rebajar su altura y adosarlo a una pared para reducir el impacto visual en el entorno-- ha requerido que el ayuntamiento apruebe una partida extraordinaria de 4.000 euros, para pagar el modificado que hay que realizar sobre el proyecto inicial.

El concejal de Infraestructuras, Miguel López, asumió ayer que el hecho de que se estén dilatando los trámites "ajustará los plazos para acometer esta obra". Las obras del Plan E deben estar acabadas el próximo 31 de diciembre, aunque es posible solicitar una prórroga de hasta seis meses para acabarlas, algo que se prevé que será necesario para terminar esta actuación.

El ascensor de Obispo Galarza permitirá conectar la actual plaza y el acceso del párking con el mirador situado en la parte superior y también dar acceso del mismo modo a la calle Angel Rodríguez.