El camposanto, con su ampliación, tiene capacidad suficiente para dar servicio a todas las defunciones que haya en Cáceres en el próximo medio siglo, según recordó ayer José Joaquín Rumbo, concejal delegado del Cementerio, que informó de las medidas especiales que se han adoptado con motivo de la celebración del Día de Todos los Santos.

Durante la redacción del plan de urbanismo en vigor, que se aplica desde abril de 1999, se desestimó el traslado del camposanto fuera del casco urbano, y se optó por dejarlo en su actual enclave, aunque con la posibilidad de ampliarlo con la cesión de suelo del sector 1.1 (el residencial Montesol), que se convertía en urbanizable. Las 1,7 hectáreas de la ampliación, que se sumarán a las 3,5 que tiene ahora el cementerio, ya se han cedido al consistorio, reiteró Rumbo, que indicó que se han invertido 473.000 euros en el 2003 en mejoras en el cementerio, a los que se añaden los 300.000 euros del coste del crematorio, que está en ejecución, un servicio que se adjudicó por concurso a una empresa del grupo Mafre.

Rumbo calculó que en los próximos días pasarán por el camposanto unas 45.000 personas, comentó que se han habilitado espacios para aparcar y que el cementerio permanecerá abierto desde las nueve de la mañana hasta las siete de la tarde. Las misas serán los días 1 y 2, al mediodía y a las cinco de la tarde.