El cineasta Mario Camus afirmó ayer que a los directores de su generación les cuesta más conseguir subvenciones públicas porque, en su opinión, parece que "todo el mundo cree que nuestro tiempo pasó". El director añadió que todas las películas que se hacen es España están subvencionadas, por lo que el cine español es "un poco mendicante y a los que tenemos cierta edad el camino se nos hace más arduo", insistió.
Camus hizo estas declaraciones durante el acto de clausura de la retrospectiva que el Festival de Cine Español de Cáceres --que esta noche le premia con el San Pancracio a toda su trayectoria-- ha organizado en la Filmoteca de Extremadura, donde se han proyectado algunas de las películas más relevantes de su filmografía como Los santos inocentes o La Colmena .
El director santanderino, acompañado por el director de la filmoteca, Francisco Rebollo, y el crítico de cine Enrique Pérez, señaló que trabaja en una película cuyos protagonistas son "gente normal" de un pueblo del norte, aunque no quiso adelantar el argumento porque, dijo, "da una mala suerte terrible". Aunque estaba previsto que comenzara a grabar esta primavera, Camus afirmó resignado que tendrá que posponer el rodaje para el otoño.
Mario Camus, quien reconoció su "especial querencia" por Extremadura y Cáceres, confesó que no va al cine porque no soporta que se coman palomitas y que se beba Coca-Cola en las salas y contó que ve las películas en su casa "dos o tres años después" en DVD.
