La mesa de Contratación municipal propuso ayer adjudicar a la empresa Hispanagua, que es del grupo de Canal de Isabel II, la redacción del proyecto y la obra de adecuación de la planta de tratamiento del agua. Se trata de una obra básica para asegurar que el agua de Cáceres reúna todos los requisitos sanitarios para su consumo. El objetivo es la reducción del nivel de trihalometanos en el agua. La legislación actual regula que no se puede pasar de los 150 microgramos de esta sustancia por litro de agua. Pero a partir del 1 de enero ese límite baja a 100 y en los últimos meses es frecuente que en los análisis del agua se sobrepasen esos 100 microgramos. Canal de Isabel II ha propuesto en su oferta la utilización de ozono para poder rebajar los trihalometanos del agua.

Si a partir del mes de enero se superan los 100 microgramos/litro, no se cumplen los requisitos que se marcan en el real decreto sobre los criterios sanitarios para garantizar la calidad del agua, lo que acarrea el riesgo de que se pueda poner en duda la potabilidad del agua de Cáceres, de ahí la importancia de esta obra.

Los trihalometanos son sustancias químicas que aparecen en el agua al tratarla en la estación depuradora y surgen por la reacción de la materia orgánica que tiene el agua bruta (la que viene del Guadiloba) al entrar en contacto con el cloro que se utiliza para su depuración. Lo que se va a hacer es cambiar el proceso de pretratamiento del agua para eliminar las materias orgánicas que trae. Es decir, cuando entre en la planta depuradora no se va a tratar con cloro (ahora se está usando cloro gas), sino con ozono, lo que reduce la posibilidad de que surjan trihalometanos.

Se interviene en el pretratamiento del agua y para ello se tiene que construir una cámara de contacto, que es donde se inyecta ozono al agua. En la oferta que ha presentado Hispanagua esa cámara se desdobla y a su vez cada una de esas cámaras también se desdobla. Cada cámara se diseña con una capacidad de 275 litros/segundo. El proceso de tratamiento del agua a partir del pretratamiento se mantiene y el cloro solo se utilizará al final del proceso de depuración.

Lo que se va a acometer ahora es solamente una primera fase que, por lo menos, garantice que no se pasa de los 100 microgramos. Esta primera fase se ajusta al presupuesto que tiene el consistorio, que es de 665.000 euros (la oferta hecha por Hispanagua es de 625.882 euros). Para completar todo el proceso se necesitaría una inversión que rondaría los 3 millones de euros.

Una cuestión importante es si la obra estará en enero. La propuesta de Hispanagua era la que se ejecutaba en menor tiempo. A pesar de ello, por los plazos ofrecidos (tres semanas para el proyecto y 5 meses y tres semanas para la ejecución) es muy difícil que esté operativa el 1 de enero.

La mesa también conoció ayer las dos ofertas presentadas para la supresión del paso a nivel de Las Minas y la prolongación de la avenida de la Constitución. El PP recordó ayer que en la mesa de Contratación se dijo por los técnicos que para hacer esta prolongación se debe expropiar suelo, cuando los expedientes para ello no están iniciados y no hay presupuesto, lo que prolongaría la fecha de finalización.