El nuevo Plan General Municipal (PGM) de urbanismo, que está pendiente de aprobación definitiva, y la explotación de Olleta son incompatibles. Entre una cantera y núcleos residenciales debe haber 2 kilómetros, y esta situación ya no se daría con algunos de los polígonos en ejecución, es el caso de la urbanización Vistahermosa, con casas dentro del radio de dos kilómetros del límite de la concesión de la explotación. El PGM prevé nuevos sectores de pisos más al sur y a menos de dos mil metros de la cantera.

José Antonio Olleta recordó ayer que están abiertos a una solución que posibilite el traslado de su actividad a otro sitio y recibir compensaciones por el derecho de concesión que tienen en la zona, unos derechos mineros que perderían. Además, destacó que de la empresa dependen un centenar de trabajadores.

El empresario se entrevistó hace unos días con la alcaldesa, Carmen Heras, quien comentó que la solución es "complicada" y que hay que tomarla contando con la Junta, que debe ratificar el plan general. Heras recordó que no se hará el proyecto de interés regional, que en su última propuesta incluía 3.650 pisos, aunque comentó que es posible que haya algún piso sin que aún sea firme la decisión.

En cuanto al auditorio, que estaba vinculado al proyecto de interés regional, el empresario insistió en que es una propuesta "que no se debería perder".

La cantera está afectada por un proceso judicial. Por un lado, una sentencia del 2006 daba la razón a la empresa y establecía que no era de aplicación la resolución de la alcaldía que ordenaba la clausura de las labores de extracción de áridos. Por otro, un fallo del 2007 consideraba que la cantera carecía de licencia para la actividad de extracción de áridos, una sentencia recurrida al Supremo.