El impuesto de vehículos está al cobro desde el pasado 20 de marzo. Se han emitido 58.910 recibos por un importe de 4.076.657 euros, una previsión de ingresos que está en unos niveles cercanos a los del ejercicio de 2008 cuando fue de 3.978.213 euros. El tributo de rodaje es el segundo que más recursos genera al ayuntamiento, pero actualmente se recauda menos que en el trienio 2012-2014, que ha sido cuando mayor recaudación se ha obtenido. Tampoco se nota la recuperación económica, este año también se está por debajo en el número de vehículos por los que se tributa que en el periodo 2012-2013, cuando se superaban los 59.000 recibos.

Este impuesto es todos los años el primero que se pone al cobro de los tres que tiene el ayuntamiento con un periodo de pago voluntario fijado. Se puede pagar hasta el 21 de mayo en las entidades bancarias que colaboran con el organismo autónomo de recaudación de la diputación. Los recibos que están domiciliados se cobrarán el próximo 10 de abril.

La cantidad que el ayuntamiento ha presupuestado este año como ingreso del impuesto de vehículos es de 4.170.000 euros. Es prácticamente la misma cantidad que se ha venido presupuestando en los últimos ejercicios y es algo superior a los cargos de los recibos que se emiten. En 2016, último año con la liquidación ya aprobada, se presupuestaron ingresos por importe de 4.177.000 euros, se emitieron cargos por valor de 4.087.000 euros y la recaudación neta al cierre del ejercicio ascendía a 3.763.000, aunque los derechos reconocidos fueron de 4.163.000 euros.

Este impuesto tiene hasta 24 tramos para los seis tipos de vehículos por los que se tributa, aunque la mayoría de los contribuyentes pagan por turismos que están entre los 8 y los 15,99 caballos fiscales. La tarifa no se modifica desde 2006. Desde el año 2012 si no se paga el impuesto de rodaje no se puede vender el vehículo, ya que la tramitación de la venta se bloquea en la Dirección General de Tráfico. Los vehículos de más de 25 años están exentos.