Ha pasado más de una década desde la última vez en la que Cáceres se puso el antifaz para bailar en la carpa de Carnaval instalada en la plaza Mayor, pero este año podrá volver a hacerlo. El ayuntamiento dio ayer el visto bueno a la instalación de una carpa entre los días 13 y 15 de febrero, tras la petición formulada por la asociación Cáceres Carnaval, que busca revitalizar esta fiesta en Cáceres tras años de abandono. La junta de gobierno estudió ayer las tres ofertas que se habían recogido para evaluar la instalación de este espacio cubierto y decidió adjudicar el contrato a la empresa pacense Carpas Viñuelas, por 4.000 euros.

La carpa se instalará en la parte alta de la plaza Mayor, en una zona próxima a la de los años más gloriosos de esta fiesta en la ciudad, en la década de los 90. Es un espacio de 500 metros cuadrados, cubierto y con laterales de cortina, que se pueden abrir para facilitar el acceso. La zona de la cubierta es "de imitación a teja" y los laterales que no son de cortina, también llevan una imitación a piedra, según explican desde la empresa adjudicataria, que ha elegido ese modelo "para que no haya mucho impacto visual, por el espacio que es", añade José Manuel Viñuelas.

La carpa estará instalada el viernes de Carnaval, para iniciar las actividades en el interior. La asociación Cáceres Carnaval y La Gran Familia, organizadores de la fiesta, ultiman el programa que arrancará en la propia carpa con el pregón de la cantante Estela y actuaciones de murgas el viernes, día 13. El día grande será el sábado con el desfile que volverá a recorrer las calles del centro y que este año saldrá de la calle Atahualpa, en Moctezuma, e irá hasta la plaza Mayor. Después habrá un espectáculo de Santuka de Fuego y se entregarán los premios a los mejores disfraces, para después seguir la fiesta en la carpa, con música en directo y dj. El domingo será la jornada familiar, con carnaval infantil, juegos, talleres pasacalles y premios por la mañana.

RESURGE LA FIESTA La Asociación Cáceres Carnaval había pedido al ayuntamiento esta carpa para potenciar el resurgir que vivió la fiesta el año pasado, cuando el Carnaval volvió a desfilar en Cáceres y el pabellón Serrano Macayo se llenó de disfraces y máscaras.

Más de una decena de grupos ya se han inscrito para el desfile que animará las calles en la tarde del 14 de febrero. "Hay grupos de 20 personas y otros que llegan a cien", señaló Marisa Iglesias, dirigente de Cáceres Carnaval. El colectivo quiere aprovechar además este Carnaval para animar a los participantes a poner en pie nuevas murgas con las que despertar la versión más descarada de esta fiesta.