Las gradas repletas con 4.000 personas bajo un sol de verano tolerante. Enfrente, sobre la explanada, 605 soldados en formación pertenecientes a las cuatro compañías que integran el Batallón de Alumnos de Cáceres. La imagen que ofreció ayer el Centro de Formación de Tropa (Cefot) nº1 volvió a confirmar los buenos tiempos que vive la base, con sucesivas juras de bandera que, si bien no alcanzan los miles de reclutas de otras décadas, reafirman la continuidad del cuartel adaptado a los nuevos tiempos del Ejército. En el acto de ayer, las autoridades civiles y militares dejaron claras las garantías de futuro de la unidad al menos hasta donde se puede conocer. De hecho, en octubre llegará otra remesa con 603 soldados.

Los 605 alumnos (28 mujeres) que ayer realizaron el juramento o promesa de fidelidad ante la bandera llevan en el centro desde el 1 de junio y pertenecen al Primer Ciclo del 2015. El acto estuvo presidido por el general de división Mariano Bayo de la Fuente, director de Enseñanza, Instrucción, Adiestramiento y Evaluación del Ejército de Tierra. La ceremonia se sucedió de forma solemne, como corresponde a este tipo de eventos castrenses, con honores, homenajes, distinciones y discursos en los que se destacó especialmente la entrega de los soldados y los cometidos y servicios que en adelante tendrán encomendados.

Durante los dos primeros meses en la base cacereña, los alumnos han recibido una primera Formación General Militar en la que se les han inculcado las nociones básicas (armamento, instrucción...) hasta la jura de bandera. Finalizada ésta y tras un mes de vacaciones, comenzará una segunda fase de otros dos meses dedicados a la Fase de Formación Específica, en la que profundizarán en los conocimientos adquiridos y además obtendrán las primeras nociones de la especialidad a la que irán posteriormente destinados (sobre todo Infantería Mecanizada Acorazada, Infantería Ligera y Caballería). Este mismo proceso será repetido por el Segundo Ciclo de 2015, que llegará a final de octubre y jurará bandera poco antes de Navidad para finalizar su estancia en Cáceres en febrero.

Los nuevos ciclos del año 2016 dependerán de los Presupuestos Generales del Estado y por tanto de la Oferta de Empleo Público, pero después de años de incertidumbre sobre el cierre de la base, y de la posibilidad de clausurar uno de los dos Cefots de la península (San Fernando o Cáceres), estos nubarrones parecen haberse despejado por completo y de entrada solo cabe esperar la nueva convocatoria de soldados para el próximo año. "De momento no hay ningún plan que implique que se vaya a desmantelar esta base de ninguna de las maneras. Hasta donde nosotros