El estreno el pasado fin de semana del cierre al tráfico de la plaza de Albatros se saldó con incidentes entre la policía y los jóvenes durante la madrugada del domingo, según avanzó ayer la jefatura municipal en su parte diario de incidencias. La medida, que aplicó por vez primera el ayuntamiento para aminorar los ruidos que desde hace más de una década se producen en el área de la movida cacereña por excelencia, acabó con la detonación de dos petardos y el lanzamiento de vasos de vidrio por parte de algunos jóvenes, aunque ninguno llegó a impactar contra los asistentes.

El servicio, compuesto por 10 agentes, estuvo operativo de tres a cinco de la madrugada, con policías que controlaron los accesos y que evitaron el paso de coches y motos, según confirmó a este diario el concejal de Tráfico y Seguridad Ciudadana, Carlos Jurado. La medida logró aminorar los ruidos, puesto que la presencia de vehículos, generalmente con música a todo volumen, impedía el descanso de los vecinos del céntrico barrio.

Durante la noche, y como viene siendo habitual, la dotación del Grupo Especial de Seguridad (GES) denunció por desobediencia en comisaría a los propietarios de varios establecimientos de copas --Jurado habló ayer de dos o tres-- que no cerraron cuando fueron requeridos por los agentes locales.

PROBLEMAS El edil indicó que en La Madrila hay dos problemas fundamentales: el tráfico --que ahora se ha reducido con esta iniciativa-- y el horario de cierre. "Hemos empezado a actuar con el tráfico, pero de puertas para adentro de los bares no hemos entrado, aunque tras la aprobación de la ordenanza de ocio remataremos", aseguró Jurado.

El responsable político reconoció que en la madrugada del domingo se produjeron alborotos. Apuntó que hubo un flujo aproximado en La Madrila de 2.000 personas y que a la hora del cierre de bares estaban concentradas en la plaza de Albatros unas 1.000. Jurado señaló que ayer los mandos mantuvieron un encuentro para valorar la entrada en vigor de la medida y que el balances es "realmente positivo".

En la misma línea se expresó el presidente vecinal de La Madrila, el histórico Miguel Salazar: "Cerrar al tráfico ha sido un éxito. A mí, Carlos Jurado me ha convencido", sentenció.