Desde hace años vengo contando las relaciones entre la base militar de Santa Ana y Cáceres, una relación que quedará sellada, más todavía si cabe, con el nombramiento del Cimov como hermano de honor de la cofradía de la Santísima Virgen de la Montaña.

¿Por qué ese nombramiento? El Ejercito ha estado siempre muy vinculado a la patrona de Cáceres, y así lo recoge numerosa documentación gráfica de las distintas bajadas de la patrona a la ciudad. En ella se refleja como el personal militar acompañaba a la procesión de uniforme, orgulloso de pertenecer al Ejército y de vivir en esta ciudad, también cabe destacar las innumerables veces que ha participado la banda de música militar en actos relacionados con la cofradía de la patrona.

La vinculación del Cimov con Cáceres se ha reflejado en innumerables ocasiones en la prensa, como, por ejemplo, cuando se concedió la Medalla de Oro de la ciudad al centro en 1994. Es una distinción que muy pocas instituciones tienen. También destaca el acuerdo, que en su momento tomaron los grupos políticos de la corporación, de donación de una bandera de España a la base, que es la que actualmente representa al centro en todos los actos castrenses, como todas las juras.

Tampoco hace falta que recuerde como luchó la ciudad de Cáceres por la continuidad del centro en la base de Santa Ana en el año 2004. Ese sentimiento y ese apoyo que vi en los cacereños no lo voy a olvidar jamás, pues podía desaparecer algo que forma parte de la historia moderna de Cáceres. Ese agradecimiento lo resaltó el coronel Domínguez Valor el día de la Inmaculada Concepción, patrona del centro de instrucción, en ese triste año.

Volviendo a la relación entre la cofradía y el Cimov, el 15 de abril de 1997 se inició un acto que lleva camino de convertirse en una tradición, como es la despedida de la patrona por todos los soldados que reciben la formación militar en Cáceres. Una de las señas de la patrona son sus mantos, y el Ejército, en esa relación con la ciudad, no podía ser menos, por eso en 1999 regaló a la cofradía, por suscripción entre todos los mandos, tropa y personal civil del centro, un nuevo manto, el 103, de terciopelo rojo con estrellas y el escudo del Cimov en colores, manto que se entregó coincidiendo con el aniversario de la coronación de la virgen.

Esa relación con la cofradía y con la ciudad no podía tener mejor continuidad que el acto que se celebra esta mañana, el nombramiento del centro militar como hermano de honor de la cofradía, máxime cuando solo existen cinco instituciones con esta distinción. Este acontecimiento se celebrará esta mañana, a las doce y media, en la explanada del santuario con un sencillo acto castrense, que quedará grabado en el corazón de todos los que asistamos.

Invito a los cacereños que améis a Nuestra Santísima Virgen y que sintáis el centro de instrucción como algo vuestro a que asistáis y compartáis con nosotros este acto.