De la incertidumbre a una grata sorpresa. Antonio Jimeno llevaba preocupado los últimos quince días porque una de sus ovejas tenía que parir y pasaban los días y la barriga del animal crecía sin parar.

"Daba miedo verla, era impresionante; si hubiera sabido lo que traía le hubiera hecho una foto". Pero la espera de Antonio tuvo un final impredecible. La mañana del 20 de febrero cuando acudió a su parcela en Mohedas de Granadilla, Jimeno se preocupó aún más porque la oveja no estaba con el resto del rebaño. Aunque el animalito tenía otra tarea más importante: ya había parido y nada más y nada menos que cinco corderos. "La vi venir con los cinco corderos un poco más pequeños de lo normal pero bien hermosos". La sorpresa fue mayúscula para la familia de Antonio que compagina las tareas ganaderas con la gestión de la tienda de ultramarinos Antonio y Flor.

La oveja y los cinco corderitos son toda una atracción en Mohedas. Los vecinos aprovechan para dar un paseo y acercarse hasta la finca de Antonio para ver este extraño fenómeno de la naturaleza. "En un parto normal suelen tener uno o dos aunque estas ovejas son de la raza romanov y algunas veces suelen traer tres corderos". La feliz mamá descansa en un cobertizo con sus cinco pequeños y está teniendo una alimentación extra para poder dar de mamar a sus crías. "Le doy pienso especial y también le estoy ayudando yo un poco con el biberón". Todas las noches Antonio se encarga de repartir un litro y medio de leche entre los cinco corderos, principalmente para apoyar a los más pequeños. "La oveja sólo tiene dos tetas y otras dos pequeñitas de las que se mama muy poco y una oveja sola no puede alimentarlos a todos". Antonio no encuentra una explicación a este quíntuple parto aunque dijo que algo tendrá que ver el macho ya que muchas de sus ovejas han traído dos corderos en un parto.