Con el permiso del Gran Teatro, buque insignia de la cultura cacereña, tanto Capitol como el Aula Clavellinas han sido durante años recintos especialmente dinámicos donde se sucedían exposiciones, charlas, eventos musicales... Sin embargo, ambos tienen su futuro en el aire tras la reestructuración de las entidades financieras que se encargaban de su gestión.

Clavellinas, propiedad del Obispado de Coria-Cáceres, estaba alquilada a la Fundación Bancaria Caja de Extremadura, que no ha renovado su cesión. Desde el 1 de enero, la Diócesis se ha hecho cargo del recinto y ha nombrado una comisión encargada de valorar el futuro de la sala. Continúa los contactos con algunas entidades que pudieran estar interesadas en su gestión, ya que la Diócesis confirma que su deseo es mantenerla abierta para ofrecer el mejor servicio a la ciudad. Dicha comisión ha decidido seguir hasta marzo con los actos que se desarrollaban tradicionalmente, de forma provisional, al tiempo que se decide el futuro de la sala.

Asimismo, Capitol lleva más de un año cerrada mientras su titular, la Obra Social de Caja España-Duero, realiza su propia reestructuración al igual que buena parte de la banca.