La Semana Santa cacereña emprenderá este año el camino para lograr su máxima distinción, la declaración de Interés Turístico Internacional, un título que solo tienen media docena de celebraciones penitenciales españolas, entre ellas todas las procesiones de Sevilla, Valladolid y Málaga. La Unión de Cofradías, formada por 12 hermandades, presentó ayer la memoria de actividades del 2006 y esbozó los objetivos del 2007, destacando el inicio de los trámites para aspirar a este reconocimiento.

"Debemos ir de la mano del ayuntamiento en este asunto, porque nuestro valor principal radica en la conjunción entre el marco cacereño y la Semana Santa. De hecho, corresponde al consistorio presentar el expediente ante la Secretaría de Estado de Turismo. Sabemos que es año de elecciones, nos da igual unos meses antes que después, pero queremos que se inicie en el 2007", explicó el presidente, Juan Narciso García-Plata.

No obstante, aclaró que el título no reportará nada al movimiento cofrade, "como tampoco lo hizo la declaración de Interés Nacional". Recordó que las hermandades cacereñas tienen como origen y objetivo su sentir religioso, "pero es cierto que el atractivo de las procesiones ha contribuido a fomentar el turismo y a generar actividad en algunos sectores. Son las fechas con más visitantes, y por ello queremos dar el siguiente paso".

Cabe recordar que el Cristo Negro anunció en noviembre su intención de iniciar los trámites para solicitar este título de cara a su procesión. "Lo lógico es que vaya implícito en el conjunto de la Pasión cuando comencemos el proceso", agregó García-Plata.

El presidente también detalló la memoria del 2006 (actos, medallas...) y avanzó la agenda del 2007: asamblea de hermandades el 3 de marzo, presentación de la Pasión cacereña en Alcalá el día 10, y pregón el 17. Le acompañaron el delegado diocesano de cofradías, Felipe Fernández Peña, el director espiritual, José María Hoyos, y el presidente de la Obra Social de Caja Duero, José M Asenjo. Todos destacaron la sucesión de actos sociales y culturales de las hermandades.

DIFERENCIAS El presidente saliente en el 2006, Luis Jiménez, también habló y se refirió a la polémica surgida por la intención de la cofradía de la Sentencia de cargar a costal. Criticó "a los dogmáticos que acuden a los medios con actitudes que rayan el fundamentalismo", y agregó que "la opinión es libre, pero las decisiones competen al pleno de la unión y quien quiera puede optar a las elecciones". Por último dio su apoyo a la nueva cofradía.