Las asociaciones de vecinos deben ser colaboradoras para informar al ayuntamiento de las deficiencias que observen en su barrio y portavoces e intermediarias entre vecinos y consistorio. He valorado siempre la buena o mala gestión sin tener en cuenta el signo político del equipo de gobierno municipal. En Cáceres existen 35 asociaciones, un número excesivo sin tenemos en cuenta que hay varias a las que solamente separa una acera. Existen dos clases o zonas con distintos problemas y que todos conocemos. Aquí es donde el ayuntamiento tiene que volcarse y darle prioridad a las más problemáticas. Una de las tareas importantes de las asociaciones es organizar charlas de mentalización cultural y de comportamiento de los vecinos hacia su barrio. Hacer una difusión escrita de los problemas que se presentan y tratar de solucionarlos entre todos es una forma de caminar para conseguir el respeto mutuo. Conseguir el bienestar de los vecinos de su entorno. Existen otros grandes problemas, pero para eso está la agrupación.