Fue un día muy simbólico, entrañable y hasta emotivo para el colegio Nazaret. Tras años de problemas y serios escollos, el centro inauguró ayer oficialmente sus nuevas instalaciones en el residencial Ronda (La Mejostilla), un amplio recinto de 12.000 metros cuadrados dotado de todos los espacios que exige un colegio moderno: guardería, laboratorios de tecnología e informática, aula de música, biblioteca, comedor, pistas deportivas y un pabellón deportivo actualmente en construcción. Los profesores, propietarios del colegio a través de la nueva cooperativa que han formado, se felicitaban emocionados al ver el final de una obra en la que han puesto todos sus esfuerzos e ilusiones, y que ha sido recompensada con un auténtico aluvión de solicitudes.

De hecho, este colegio concertado tiene 300 alumnos entre los niveles de Infantil, Primaria y Secundaria, todos al completo salvo el último ciclo de Secundaria por las circunstancias del traslado. Sin embargo, la previsión de llenar estas aulas es tan evidente que el centro ya ha pedido una segunda línea para ESO, de modo que cada curso pueda tener dos clases. Y es que su nueva ubicación en Mejostilla le garantiza una población escolar elevada. Sin ir más lejos, el actual Primero de Infantil recibió el año pasado 90 solicitudes para 25 plazas, mientras que la guardería ya tiene 40 niños (puede albergar más).

Al acto de inauguración asistió la alcaldesa, Carmen Heras, que se mostró sensibilizada con este proyecto dada su larga experiencia docente. "He sido testigo de la cantidad de vicisitudes que ha pasado el profesorado para levantar el centro, pero lo han logrado con esfuerzo, energía y ganas. El colegio es fruto de su creatividad y empeño", dijo Heras, que valoró "los numerosos recursos" del recinto y calificó el acto como "un momento gozoso para el barrio y la ciudad".

La alcaldesa se refirió así al difícil proceso que ha atravesado el profesorado para construir el centro, después de 36 años de impartir enseñanza en el antiguo Nazaret, situado en la Madrila. La falta de espacio y las instalaciones obsoletas de este recinto obligaron a iniciar los trámites para la edificación de uno nuevo, que cambió incluso de ubicación, del R-66 a Mejostilla, una vez avanzado el proyecto. "Pero ésta es la recompensa a tantos problemas", declaró ayer el director, Felipe Grajera.

Por su parte, el responsable provincial de Educación, Enrique García, se congratuló de la ampliación de la oferta educativa en Mejostilla y avanzó que también se estudia una solución para los problemas de plazas en ESO.