Periodista

Desde hace muchos años el colegio Nazaret está cumpliendo con dignidad su misión educativa en una zona en la que los distintos gobiernos han sido incapaces de ofrecer una escuela pública. Hace tiempo ha mostrado interés por una parcela ubicada en un polígono en expansión para construir un nuevo colegio en la ciudad.

Pero hay un problema. Resulta que la Junta de Extremadura y el Ayuntamiento de Cáceres no se ponen de acuerdo. La Junta argumenta que según la ley toda parcela de uso educativo le debe ser ofrecida por si desea utilizarla. El ayuntamiento dice que se la ofreció.

Y aquí viene el lío. Porque según la Junta se le ofreció para servicios sociales y no la quiso. Pero ¿la quiere para servicios educativos? No lo sabemos, pues no han dicho que vayan a levantar un centro educativo en el lugar. Tan sólo exigen que se la ofrezcan.

En ese polígono es necesario aumentar la oferta educativa, ya que debido a la incompetencia de algún gerifalte educativo la oferta pública es ínfima. Parece pues necesario que el enredo se desenrede cuanto antes.

¿Tan difícil es entender la legislación? ¿Tan complicado es aclarar si se va a construir un colegio público? Sería muy grave que se denegara el permiso a la iniciativa privada y después no se construyera nada. Y también sería muy grave que se le concediera la parcela y luego tuviera que tirar todo lo construido. Aquí está en juego el futuro de alumnos y profesores. Dos razones que urgen a ambas instituciones a llegar a un acuerdo en el menor tiempo posible.