La Comisión Regional de Precios se reúne el próximo miércoles y uno de los dos expedientes sobre los que se tiene que pronunciar es la revisión de la tarifa del autobús urbano de Cáceres. Por el porcentaje de incremento propuesto y por la fecha de la última subida, fue en 2012, lo más probable es que se apruebe. Los nuevos precios no empezarían a aplicarse hasta el próximo 1 de julio, más de un año después de que saliesen de la Mesa del Transporte y nueve meses después de su aprobación por el pleno del ayuntamiento. La aplicación de los nuevos precios también permitirá la entrada en vigor de los cambios en las líneas que se financiarían con el incremento de la tarifa.

La última vez que la subida del autobús de Cáceres pasó por la Comisión de Precios se rechazó. Era el año 2005 y el órgano regional consideró excesiva la propuesta y la rebajó. La revisión de precios del año 2012 se saltó la comisión, pero entonces se advirtió al ayuntamiento de que las siguiente debían de pasar por este órgano una vez que se había derogado la ordenanza fiscal que regulaba la tasa por la prestación del servicio de transporte. Debe pasar por la comisión porque lo que se paga por la utilización del autobús urbano no es una tasa o tributo local, sino una tarifa con la que se remunera a la empresa que gestiona el servicio de autobuses por los costes del mismo.

En la Comisión de Precios participan representantes de la administración regional, de las asociaciones de consumidores, de los sindicatos, de las cámaras de comercio y de la federación de municipios y provincias.

El cambio que se propone en el billete ordinario lo subiría 10 céntimos (de 1 a 1,10 euros) y en el bonobús conllevaría un incremento de un euro (de 7 a 8 euros). Cuando la revisión de la tarifa se dictaminó en el ayuntamiento se calculó que se conseguirían unos ingresos de 327.000 euros que se destinarían a financiar los 304.000 euros de los costes de los cambios de las líneas.

UNIVERSIDAD LABORAL / Una de estas modificaciones no podría aplicarse a partir del 1 de julio, habría que esperar hasta septiembre, cuando comienza el curso escolar. Es la nueva línea de refuerzo que conectaría los barrios y sectores de La Mejostilla con el campus universitario pasando por la Universidad Laboral. Este nuevo servicio solo funcionaría en los días lectivos.

El servicio de transporte urbano, que presta en concesión la empresa Subus, tuvo 4.291.685 usuarios o viajeros en 2016, el primer año que se cerraba con un incremento después de once anualidades seguidas con pérdida de usuarios desde que en 2004 se alcanzase la cifra de 6,1 millones. Las líneas 2 y 8 y la del campus universitario son las que tienen más usuarios.