"Ahora mismo el mayor esfuerzo se hace con la concesión del agua, el plazo es de seis meses, pero no podemos perder más tiempo". La alcaldesa, Carmen Heras, destacaba recientemente, en un repaso a asuntos de actualidad en Cáceres, el concurso para adjudicar a una empresa la gestión del agua como una de las cuestiones prioritarias.

La prórroga del contrato con la empresa Canal de Isabel II acaba el 31 de julio. No caben más prórrogas, el pliego que sirvió de base para adjudicar el servicio a Canal hace 15 años lo deja claro: "La prórroga se extenderá hasta que el nuevo contratista se haga cargo del servicio o la corporación local empiece a prestarlo por administración, sin que pueda exceder en ningún caso los seis meses".

Hay opciones, pero lo mejor es que se cumplan todos los plazos y el nuevo concurso esté resuelto en julio. Una de las opciones es que el ayuntamiento se haga cargo de la gestión del servicio, el portavoz del ejecutivo municipal, Lorenzo de la Calle, lo dijo claramente en el último pleno: la gestión será directa si los grupos de la oposición bloquean el concurso, aunque lo que no se especificó en esa reunión fue si se contará con los medios necesarios, especialmente en cuanto al personal, para una gestión directa del agua.

La otra posibilidad es repetir lo que pasó en las navidades del 2005: prorrogar la relación con Canal por situación de emergencia, posibilidad que viene recogida en la ley de contratos, aunque para situaciones que supongan un grave peligro. Entonces ese peligro fue que la basura no se podía dejar en la calle, ahora sería que no se puede dejar a la población sin agua. Pero cuando hace 3 años el gobierno municipal tomó dicha decisión el más crítico fue el principal partido de oposición, entonces era el PSOE, que ahora está al frente del gobierno municipal.

"No deberíamos salirnos de febrero" para la aprobación de los pliegos de condiciones del concurso, según calculó la alcaldesa, que recordó "la transparencia" con la que se está tramitando todo el proceso (en este año se han celebrado cinco reuniones entre el gobierno y la oposición para examinar el pliego técnico y el reglamento del servicio del ciclo integral del agua --depuración y tratamiento--). "Se está justo de tiempo, pero vamos a llegar, estamos trabajando todos en este tema", añadió Heras, que confía en tener el apoyo del resto de grupos, a excepción de IU, que ha dejado claro su rechazo a una gestión indirecta del agua.

"Cada grupo político ha hecho su planteamiento, IU está solo, el resto de grupos entienden que lo importante es que se dé un buen servicio y que lo de menos es ahora la herramienta elegida dentro de la legalidad para prestarlo".

La gestión indirecta

Populares y socialistas, que suman la mayoría de los votos de la corporación, están de acuerdo en el fondo, en la gestión indirecta, pero una de las diferencias son las dudas expresadas por el PP sobre si el concurso está dirigido para que acabe adjudicándose a una empresa especifica. Los populares no quieren que se repita lo ocurrido hace un año en Coria, donde tras presentarse un segundo informe el concurso recayó en la oferta de Aquagest, empresa distinta a la que se proponía en el primer informe elaborado para la adjudicación de este servicio.

La alcaldesa consideró que estos planteamientos resultan "una frivolidad" porque la adjudicación es un procedimiento administrativo en el que "todo va a ser público, los grupos políticos van a tener toda la documentación", recordó.

Este concurso del agua, a diferencia del anterior, firmado en 1995, o el de la basura y limpieza viaria, del 2006, servicio con un coste superior al que tiene el agua, no es solo gestión de un servicio, sino que es también, como hacen muchos ayuntamientos (Cáceres estaba siendo una excepción), un medio de financiación de las arcas locales con el pago de un canon que tiene que aportar la empresa que gane. En esto ya se está en cierto modo fuera de plazo. Este canon es para afrontar la amor-