A 86 años y medio de prisión fue condenado por la Audiencia un joven cacereño que fue juzgado en el pasado mes de abril acusado por su expareja de maltratarla, coaccionarla y violarla de forma reiterada entre agosto del 2001, en que empezaron el noviazgo, y noviembre del 2003, en que el acusado fue detenido.

El tribunal que le juzgó le consideró culpable de hasta 13 delitos de violación, un delito de violencia familiar habitual, uno de coacciones, dos de detención ilegal y dos faltas de maltrato.