Después de sufrir durante 15 años malos tratos por parte de su marido, la Audiencia Provincial ha dictado sentencia en contra de Jorge Ch. M., condenandole a 17 años y 7 meses de prisión y prohibiendole acercarse a su exmujer en un radio no inferior a quinientos metros y comunicarse con ella por cualquier medio durante cinco años.

El fiscal en el juicio celebrado el pasado 2 de junio pidió la pena de 16 años de cárcel y que fuese acusado por tres delitos.

PENAS MAYORESAl final la pena ha sido superior y ha sido declarado autor responsable de los delitos de violencia física y psíquica habitual, delito de maltrato leve, delito continuado de agresión sexual y delito continuado de quebrantamiento de condena.

Los testimonios de peritos y psicólogos que confirmaron que la relación le ha ocasionado un estado psicológico conocido como el síndrome de la mujer maltratada y el de la propia mujer que fue detallando, sin poder contener las lágrimas y sollozos, los constantes y continuos insultos y agresiones a las que estuvo sometida, fueron lo suficientemente concluyentes para el dictamen de la sentencia.

La máxima pena, de doce años de prisión, le ha sido impuesta por el delito continuado de agresión sexual.

Además la sentencia del Juzgado de Instrucción número 3, impone al condenado indemnizar a la víctima con la cantidad de 250 euros por días de curación y 60.000 euros por daños morales.

15 AÑOS DE MALTRATO Cuando se casaron en 1994 ella tenía tan sólo 15 años y él 18 y desde el inicio de la relación tuvo que soportar las agresiones físicas y psicológicas que han continuado durante 15 años.

El primer intento de acabar con esta tortura fue en el 2001 en donde "cansada de soportar sus agresiones y de escuchar falsas promesas de mejorar", declaraba la exmujer en el juicio, le denunció por primera vez y se separaron. Pero esto no detuvo al condenado que quebrantando la orden de protección continuó con el maltrato y las agresiones sexuales hasta el 2007 cuando presentó de nuevo denuncia contra Jorge Ch. M. que es la que ha dado lugar a esta condena.

El acoso era tan grande que incluso la exmujer llegó a retirar la denuncia manifestando que lo hizo "por miedo por mí misma y por mis hijos".

Desde noviembre del año pasado el autor de estos delitos se encuentra ingresado en prisión provisional.