El consejero de los Jóvenes y del Deporte, Carlos Javier Rodríguez, se pronunció ayer sobre la ley de ocio por la que actualmente se rige la comunidad extremeña, y dijo que "es más que probable que deba revisarse y reajustarse, porque los tiempos cambian". Así lo manifestó el responsable regional en una entrevista a la Agencia Efe, a quien matizó que esta iniciativa debe venir precedida de "una gran sentada entre todos los afectados, para encontrar soluciones que satisfagan a todos".

Rodríguez se refirió al caso específico de Cáceres y citó la "estrecha relación" entre el presidente regional, Fernández Vara, y la alcaldesa, Carmen Heras, para "estudiar un posible traspaso de competencias" de los horarios de los bares y asumir una situación que ahora depende de la Administración autonómica.

En este sentido, el consejero manifestó que cada ayuntamiento es el organismo que mejor conoce su realidad "y tal vez, a partir de ese nuevo marco competencial, se puedan establecer nuevos criterios que a la larga sirvan para que unos puedan divertirse sin tener que perjudicar el derecho al descanso de otra parte de la población".

CONCIERTOS En opinión de Carlos Javier Rodríguez, las situaciones vividas entre los meses de septiembre y octubre en la capital cacereña, con motivo de la celebración del Festival Pop-Art, con conciertos suspendidos y denuncias de unos empresarios hosteleros a otros, "no se deben repetir, sobre todo porque era un certamen que contaba con el apoyo de varias administraciones, y la imagen que dio la ciudad no fue buena".

En este sentido apuntó que "se dieron carambolas, que no debieran volver a sucederse, que los jóvenes no entienden, y aunque las formas de divertimento en el ocio nocturno en otros países europeos pueden ser diferentes, ese cambio de mentalidad puede necesitar de muchos años, por lo que hay que intentar reconducir situaciones que no benefician a nadie".

Por eso, Rodríguez insistió en que Cáceres se encuentra "en un momento muy bueno" para encontrar soluciones a la problemática suscitada en relación al tema del ocio nocturno, por varios factores.

El consejero ha señalado entre esos factores la receptividad que el presidente del Ejecutivo extremeño, Guillermo Fernández Vara, ha mostrado respecto de este asunto, cuando comentó que éste sería uno de los puntos que se analizarían en el primer Consejo de las Grandes Ciudades.

También ha destacado la actitud de la alcaldesa cacereña, Carmen Heras, quien, en su opinión, "ha decidido plantar cara al problema, reunirse con todas las partes afectadas, e intentar encontrar puntos en común entre las distintas partes a que hace referencia esta situación".

Y añadió: "Me consta que Carmen quiere dar con vías de diálogo, que tiene 381 licencias de locales pendientes de poner en breve en orden". El ayuntamiento cacereño se encuentra precisamente en este punto. Ya cuenta con los informes de cada bar para comprobar la situación legal de todos ellos.