El gobierno local ha adelantado sus planes para la semipeatonalización de espacios del centro. La intervención en Santo Domingo y en la plaza de la Concepción no cuenta con partida en el presupuesto del 2003, y ayer la comisión de Gobierno acordó iniciar los trámites para habilitar el crédito necesario que permita adjudicar la obra de restricción de la circulación en la calle Santo Domingo y en la Concepción.

La construcción del aparcamiento de Obispo Galarza y los buenos resultados, al menos no ha habido protestas destacadas, del sistema de cámaras y pivotes instalados en los accesos y salidas del recinto intramuros ha animado al gobierno local a ampliar la peatonalización, una política que ayer recibió un respaldo importante con el anuncio de la asociación de comerciantes de que las ventas en la calle Roso de Luna habían aumentado un 20% en los días siguientes a la peatonalización, dato citado ayer por el edil de Obras, José Joaquín Rumbo.

El gobierno intervendrá en la plaza de la Concepción, obra que afecta a la calle General Ezponda, sin esperar a que esté acabada la ronda norte, que es la alternativa a Hernán Cortés. Al restringir la circulación por General Ezponda, la plaza queda con un único acceso, las calles Sande y Zapaterías, a las que se llega por Hernán Cortés y Mira al Río. No es la primera vez que el gobierno adelanta actuaciones que afectan a la circulación sin esperar a las alternativas, ya en la pasada legislatura se eliminaron la mayoría de los aparcamientos de la plaza cuando todavía no estaba acabado el párking de Galarza.

En sólo dos legislatura se ha pasado de una ordenación del tráfico que facilitaba el acceso a la plaza a otra radicalmente opuesta, que se inició con la peatonalización de San Pedro, ha seguido con la de Roso de Luna y continuará con la calle General Ezponda y la plaza de la Concepción, actuación que terminará con la circulación de paso por la plaza Mayor, a la que sólo acabarán accediendo los vehículos que obligatoriamente tengan como destino este recinto.

PEATONALIZACION INCOMPLETA

La diferencia entre San Pedro y Roso de Luna y la plaza de la Concepción es que en el primer caso se trata de una peatonalización completa y en el segundo de una semipeatonalización, ya que en Concepción y Santo Domingo se colocarán pivotes retráctiles que se accionan con una tarjeta que se distribuirá entre los residentes, servicios públicos y carga y descarga. En el eje que forman Roso de Luna, San Juan y Donoso Cortés se anunció una actuación similar, aunque aún no está en funcionamiento.

La principal crítica que recibe la restricción del tráfico es que no se acompaña de una oferta suficiente y próxima de aparcamientos. La alternativa es, de momento, Galarza, que la mayoría del año es suficiente, aunque no está próximo a todos los espacios que cubre la peatonalización.