El ayuntamiento cerró el ejercicio del 2003 con una deuda a acreedores de 29,2 millones de euros, según se recoge en la cuenta general de ese año que el pleno de la corporación municipal aprobó definitivamente durante su última reunión, que se celebró el jueves. La deuda se ha recortado un 16,4% en relación al 2002, un ejercicio que se cerró con un débito de 35 millones. El dato del 2003 invierte la tendencia de los dos ejercicios anteriores con incrementos de la deuda a acreedores en el 2001 (30%) y en el 2002 (6%).

La cifra de la deuda es inferior a las cantidades que el consistorio tiene pendientes de cobro. El 2003 se cerró con 36 millones de euros, que se deben al ayuntamiento y que todavía no se han abonado, la mayoría es de ejercicios anteriores al 2003. Esta cifra es parecida a la de años anteriores. El año 2002 terminó con 38,6 millones de euros pendientes de cobro, y el 2001 con 37,4.

En la cuenta del 2003 no están reflejadas las operaciones de recaudación a morosos y pago a proveedores que se están llevando a cabo durante el 2004, año en el que se ha reforzado la recaudación ejecutiva con miles de notificaciones de apremio por deuda de los últimos cuatro ejercicios que no está prescrita y con embargos de cuentas. En este ejercicio también se ha cerrado un acuerdo de intermediación entre el consistorio y Caja Extremadura para pagar deuda, casi toda es de los últimos tres años, a proveedores del ayuntamiento.

El pleno de la corporación local, que no entró a debatir las cifras de la cuenta general, decidió desestimar la única alegación, de un particular, presentada a las cuentas, que se aprobaron con el voto a favor el PP. El PSOE votó en contra e IU se abstuvo.