El edil delegado de Urbanismo, Andrés Nevado, confirmó ayer que el consistorio mantiene su compromiso de poner a disposición de la Consejería de Fomento suelo de propiedad municipal para la edificación de pisos acogidos al programa especial de viviendas que saldrán a la venta a 60.000 euros. La junta local de gobierno acordó la participación del ayuntamiento durante la última reunión que celebró en julio antes de las vacaciones.

Nevado explicó que el consistorio tiene en estudio "en qué polígonos hay cesiones --obligatorias-- de suelo con las que podamos contar para ofrecérselas a la comunidad --autónoma--". El edil aclaró que esas entregas de terreno se harán "en función de las disponibilidades del ayuntamiento, aunque sin descapitalizarnos" porque el consistorio "tiene otras necesidades que cubrir", manifestó el concejal.

Ocho de los nueve sectores previstos en suelo urbanizable en el plan de urbanismo en vigor están en distintos grados de desarrollo, lo que supone para el ayuntamiento --sólo con las cesiones obligatorias del 10%-- una reserva de suelo significativa.

Nevado recordó que el ayuntamiento ha hecho "esfuerzos importantes" para ofrecer viviendas a aquellos sectores de población más desfavorecidos, y aludió al apoyo dado por el ayuntamiento a las promociones de la Ley del Kilómetro, de las que en Cáceres se han ejecutado cuatro.

SECTOR PRIVADO El concejal indicó que el ayuntamiento respaldará los proyectos de interés regional que la consejería o promotores privados presenten en el ayuntamiento. "No habría inconveniente --añadió-- en apostar por esos proyectos siempre que se cumplan las condiciones respecto a enlaces y conexiones con los sistemas generales".

Promotores privados se han interesado en Cáceres por la edificación de viviendas a 60.000 euros y al menos ya habría un proyecto presentado en la Junta. La consejera de Fomento, Leonor Martínez-Pereda, anunció el pasado julio que en septiembre se presentarían los primeros proyectos para la edificación de viviendas del plan especial en Cáceres, donde se reserva un cupo de 1.500 pisos, a los que podrán acceder familias cuyos ingresos ponderados máximos sean inferiores a 3,5 veces el salario mínimo interprofesional, según se apunta en el plan de vivienda y suelo de la región.