El presidente de la Asociación de Empresarios Farmacéuticos de Cáceres, Rafael Baños, criticó ayer las novedades del nuevo anteproyecto de Ley de Farmacia de Extremadura, y lamentó que en su redacción la negociación haya sido "inexistente". Afirmó igualmente que la Junta se ha "excedido" en su funciones en la elaboración de la medida, ya que según dijo la Consejería de Sanidad "no tiene competencias fiscales como para imponerles el pago de un impuesto por transmitir su oficina de farmacia". Esta situación, según la asociación, "no tiene antecedentes legislativos". Baños dijo que con la ley se eximiría a los dueños de las farmacias de su titularidad "solo con una simple sanción administrativa, no penal". Exigió a la Administración que los farmacéuticos extremeños "gocen de los mismos derechos que en otras comunidades autónomas".