La Consejería de Cultura resolvió el 12 de febrero del 2004 incoar el expediente para la declaración de bien de interés cultural de la Casa del Sol y de la iglesia conventual de San Francisco Javier, un templo de estilo barroco, que se acabó en 1755 y que los jesuitas solo lo pudieron ocupar durante doce años debido a su expulsión de España en 1767.