El temporal volvió ayer a causar daños en diferentes puntos de la capital cacereña, como ya ocurriera en la madrugada del miércoles debido a las intensas lluvias y el fuerte viento. El desprendimiento de una parte de la fachada de los Servicios Territoriales de Bienestar Social y de Sanidad y Consumo en Hernán Cortés, sin daños personales, y la caída de una gran cantidad de árboles que produjeron daños en dos vehículos en Aldea Moret y Rodríguez de Ledesma fueron las incidencias más destacables en una jornada en la que también el viento derribó señales de tráfico en la ronda norte.

PLAN DE ACTUACION El dispositivo puesto en marcha por el ayuntamiento se mantenía activo ayer todavía tras haberse iniciado en la madrugada del miércoles. Operarios de los servicios municipales, de la brigada de Obras y de la empresa Conyser, además de bomberos y la policía local, tuvieron que intervenir en numerosas ocasiones para atender todas las incidencias.

En este sentido, el concejal de Mantenimiento, José Joaquín Rumbo de la Montaña, dijo ayer que este dispositivo "funcionó muy bien y se solucionaron todos los problemas surgidos durante la noche". Las zonas más afectadas fueron las calles Atahualpa, San José, Capitán Luna, Viriato, Donoso Cortés, avenidas de la Hispanidad y de Alemania, el paseo de Cánovas y las plazas de Albatros y de Colón.

Las inundaciones más graves ocurrieron en el puente de San Francisco y la avenida de la Hispanidad donde incluso dos vehículos tuvieron que ser trasladados por la grúa municipal tras haber sido arrastrados por la corriente. Los camiones de alta presión realizaron su primera salida a las once para limpiar los tragantes, obstruidos por hojas y ramas. Los operarios retiraron seis camiones por toda la ciudad, sobre todo en las grandes avenidas, donde se registraron las mayores complicaciones.