LA JEFATURA de la policía local recibió el lunes, a las 11.50, una llamada de la guardería de la calle Amberes denunciando la desaparición de un niño de 3 años. Al lugar se desplazaron varias dotaciones que comprobaron que el niño había aparecido, ya que se encontraba en unas oficinas muy próximas donde trabaja el padre del menor.