El concejal de Deportes y responsable del mantenimiento de las pistas deportivas en los barrios, Lázaro García Amado, defendió ayer el buen estado en el que se encuentran las instalaciones de Llopis Ivorra, en la que el jueves resultó herido un joven al caérsele encima la estructura de una de las canastas. José Antonio Portillo, de 21 años, sufrió fractura de dos dedos de una mano y varias contusiones.

García Amado lamentó lo ocurrido, pero aseguró que el incidente es consecuencia de los actos vandálicos que sufren estas instalaciones. "Los jóvenes, como el herido y sus amigos, se recuelgan continuamente de las canastas y esto hace que cedan los anclajes", explicó.

El presidente vecinal del barrio, Gregorio Talavera, secundó la opinión del concejal y aseguró que él mismo había llamado la atención en reiteradas ocasiones al joven herido y a sus amigos por colgarse de las canastas, entre otras gamberradas que achaca a este grupo juvenil. "Iban todos los días a hacer daño a las instalaciones y tengo testigos de ello", declaró Talavera. José Antonio Portillo aseguró el sábado a este diario que sólo rozó el aro y no se colgó de él.

Un técnico municipal de Deportes revisó ayer las estructuras de las canastas y, según el concejal, verificó que se encontraban en "perfecto estado" y que el accidente se había debido a la "cesión de los anclajes, pero no por rotura, sino porque se han forzado", manifestó el edil, quien confirmó que ya se ha encargado la reparación.