La crisis parece no haber llegado aún al sector de las celebraciones a tenor de la cantidad de jóvenes que ayer paseaban por las instalaciones del Serrano Macayo en busca de todo lo necesario para preparar su boda, o de las familias que comenzaban a prepararse para una próxima comunión. La segunda jornada de la feria Cáceres Celebra estuvo marcada por el trasiego de público, principalmente en torno a las tapas elaboradas por los alumnos de Hostelería y a los dos desfiles programados para las jornadas de ayer: el de trajes de comunión por la mañana y el de trajes de madrina y novia por la tarde, en el que más de 800 personas, según la organización, presenciaron desde las gradas del pabellón municipal el pase de modelos. En total más de 1.500 visitantes pasaron ayer por la feria del Serrano Macayo, confirmaron al cierre.

Los organizadores creen el cambio de escenario de la feria --la primera edición, el año pasado, se desarrolló en una carpa instalada en el recinto ferial-- es una de las claves de la buena respuesta del público a las actividades que se están desarrollando, y apuestan por que en las próximas ediciones se mantenga este evento en un enclave céntrico como es el pabellón Serrano Macayo. En los mismos términos se expresan algunos de los 43 expositores que participan en la feria, y que mostraron a este diario su sorpresa por la cantidad de personas que acudían a la feria "no solo a ver sino también a buscar".

Las actividades programadas en la ludoteca infantil se convirtieron en otro de los aciertos destacados por los visitantes y en la opción preferente de quienes acudían con niños pequeños. Más de 200 niños pasaron por los talleres de papiroflexia, manualidades, o pintura de cara, que se repetirán esta mañana, última jornada de la feria, desde 11.00 horas y por la tarde a partir de las 16.30. Desfiles y actuaciones musicales completan el programa de hoy.