La Policía Nacional ha detenido a dos de los cuatro presuntos implicados en el asalto a punta de pistola de un piso en la calle Serranillos (residencial Gredos) el viernes por la noche y ayer buscaba todavía a otras dos personas, entre ellas el que esgrimía el arma con el que apuntó al dueño de la vivienda pidiéndole dinero, según informaron fuentes policiales.

Los asaltantes solo se llevaron una hucha con unos mil euros aproximadamente que la víctima y su novia, según declaró esta a la policía y a los vecinos, habían ahorrado para las vacaciones. La pareja víctima del asalto permaneció ayer ausente de su vivienda. María del Carmen Palomino, una de las vecinas que presenció desde la calle parte de lo ocurrido, contó que horas después del suceso el novio les informó que la joven tuvo que ser hospitalizada con una crisis de ansiedad, aunque este diaro no pudo confirmar oficialmente este extremo.

EL ASALTO La Policía Nacional detuvo pocas horas después del asalto a dos de los presuntos cómplices, un hombre y una mujer de nacionalidad española que permanecían ayer retenidos en la Comisaría, y mantenía abierta la investigación aunque el caso no estaba del todo claro.

Lo único que se podía determinar con exactitud es que poco antes de las diez de la noche un hombre, canoso, moreno de piel y vestido totalmente de negro, abordó en el portal número 6 de la calle Serranillos, un piso de protección oficial, a un joven y a su novia cuando estos iban a entrar en su casa, uno de los bajos.

El individuo apuntó con una pistola al joven, le pidió dinero y éste les entregó la hucha. "Vimos salir corriendo a la muchacha del portal pidiendo auxilio y ayuda para su novio. Antes no nos dimos cuenta de nada", relató María del Carmen Palomino, que se encontraba en la acera de enfrente con unos amigos en el momento de los hechos. Otras vecinas, como Raquel Rodríguez, también escucharon los gritos y el revuelo aunque no llegaron a intervenir.

Palomino cuenta que la chica les manifestó en la calle que había un hombre apuntando a su novio con una pistola. "Decía que ella había conseguido zafarse y huir. Lloraba y apenas se le entendía. Poco después vimos a un hombre canoso saliendo tapándose un poco la cara pero andando tranquilamente. Llegó a un coche y se marchó, aunque cogimos la matrícula con un móvil". La joven, añadió esta vecina, estaba "muy nerviosa" y le prepararon una infusión.

Tras el suceso, varias patrullas de la Policía Nacional montaron un dispositivo en la zona para localizar a los autores, practicando las dos primeras detenciones en una multitienda de la barriada. Fuentes policiales confirmaron que los cuatro individuos procedían de Madrid.

MERODEABAN POR EL BARRIO Otro de los vecinos, que prefirió identificarse con las iniciales C. I., aseguró, y así se lo dijo también a la policía, que el día antes --el jueves-- él vio el mismo coche aparcado en la calle con tres hombres y una mujer en el interior. "Me pareció sospechoso, tenía un cristal roto y la matrícula como atada con una cuerda. Se lo comenté a mi mujer y a mi hermano, pero no se nos ocurrió llamar a la policía" , recordó. Según su declaración, el coche, un Xantia con matrícula de Madrid, estuvo merodeando por el barrio toda la tarde de ese día.

Los vecinos mostraron ayer su extrañeza por lo atípico del caso para una ciudad como Cáceres y "un barrio tranquilo y obrero como éste", decía María del Carmen Palomino. A pesar de ello, todos expresaron su temor y "miedo" a que vuelva a producirse un hecho como éste.