"¿Alguien conoce la Guardia Civil?". Con esta pregunta, los chavales del campamento urbano Aldea Moret 2007 iniciaron ayer su visita a las instalaciones de la Comandancia de Cáceres acompañados de sus monitores. Los niños, de entre 8 y 16 años, participan durante este mes en este campamento organizado por el Instituto Municipal de Asuntos Sociales que cumple su tercera edición.
La exhibición comenzó con un vídeo que les mostró las diferentes especialidades y funciones del Instituto Armado desde que fue fundado por el Duque de Ahumada en 1844: el control de armas y explosivos, el resguardo fiscal del Estado, la vigilancia del tráfico en las carreteras, la custodia de las costas y la conservación de la naturaleza y el medio ambiente, entre otros.
A continuación, pudieron conocer de primera mano cómo funciona el centro operativo de servicios de la provincia. "¿Puedo ver los datos de mi padre en el ordenador?", preguntó uno de los chavales a los agentes, que inmediatamente comprobó cómo la Guardia Civil puede ver en pantalla los datos de una persona con solo teclear la matrícula de su coche. Además, desde la sala, pueden localizarse los vehículos del cuerpo e iniciarse videoconferencias con todas las comandancias provinciales.
Seguidamente, los niños descendieron a los sótanos en los que se encuentra la galería de tiro, destinada al entrenamiento de los agentes de la provincia de Cáceres. Allí les explicaron en qué consisten los distintos ejercicios, y pudieron ver los impactos de bala sobre los objetivos, o colocarse los cascos y las gafas reglamentarias.
Coches y perros
Lo más interesante para los más pequeños estaba programado para el final de la visita. En los garajes, pudieron montarse en las rotundas motocicletas que usa el servicio de tráfico en los controles de carretera y comprobar cómo suenan todas y cada una de las sirenas a la vez que parpadean las luces rojas y azules. También hicieron lo propio con los tradicionales Patrol de la institución, e incluso pudieron subir a un furgón de presos.
Para finalizar, varios agentes realizaron una demostración cinológica con varios perros destinados a la detección de drogas o explosivos y al rescate de personas en peligro. Los chavales aplaudieron efusivamente cuando el can encontró la maleta sospechosa y se abalanzó sobre ella, demostrando las habilidades adquiridas con el entrenamiento. La niña que preguntó "¿hay collies aquí?" no se quedó insatisfecha, después de todo.
