El parque del Príncipe se llenó ayer de madres, padres, abuelos y niños que celebraron durante toda la jornada el Día Internacional de las Familias en medio de un gran picnic popular. Unos 2.000 asistentes demostraron que la convivencia entre generaciones es gratificante y enriquecedora. Organizado por el Instituto Municipal de Asuntos Sociales (IMAS) y el Consejo Sectorial del Menor, el Día de la Familia cumplió su objetivo: sensibilizar en la transmisión de valores.

Carmen Heras, alcaldesa de Cáceres afirmó en su visita al recinto: "Queremos potenciar las relaciones intergeneracionales. Servimos de intermediarios para conseguir un buen clima durante un día de campo y convivencia. Se enmarca dentro de la política del ayuntamiento de promover una ciudad cada vez más saludable y solidaria", afirmó.

Pertrechadas con su mesa de camping, tortilla de patatas, filetes, ensaladilla, refrescos y cafés para la sobremesa estaban ayer juntas tres generaciones de una familia: Matilde María del Carmen Zas Torres (abuela) Conchi Vaz (madre), Cristina Sánchez Vaz (nieta) y Joaquina Cortés Olivenza (amiga de la familia). Afirman que son personas muy familiares y que pretendían pasárselo en grande durante todo el día. También con ánimo de pasar al menos la mañana en el parque asistió Emilio Morillo, acompañado de sus dos hijos Noelia y Samuel. A primera hora habían disfrutado como nadie en el taller de globoflexia y manifestaban que "se lo estaban pasando pipa".

Acompañaron, entre otros, a la alcaldesa en su visita de ayer Begoña García directora del Instituto Municipal de Asuntos Sociales; Marcelina Elviro, concejala de Asuntos Sociales; Javier Santano, y Liliana Fernández, educadores y trabajadores sociales.