Tras largas décadas esperando una infraestructura aérea realmente certificada y autorizada, Cáceres podría estrenar su aeródromo en 2016 junto al Hotel Palacio de Arenales, a siete kilómetros del centro de la ciudad. El Gobierno de Extremadura se compromete a ello con 4,4 millones de euros. Diego Andrada, presidente del Aeroclub de Cáceres, es uno de los profesionales que espera la obra con auténtica expectación tras largos años en precario. En 2007 tuvo que trasladar su escuela de vuelo a Córdoba por falta de una pista legal, pese a que lleva 30 años de trayectoria (fue una de las primeras del país). También dirige Andi Aeronáutica, la única fábrica española que construye íntegramente pequeños aviones avanzados (ultraligeros), y paradójicamente sufre la misma carencia de una pista legal donde probarlos.

--¿Cáceres realmente es una excepción en dotaciones aéreas?

--Sí, pero no solo la capital, se trata de la única provincia española sin ninguna infraestructura. Hay ciudades mucho más pequeñas que tienen sus campos de vuelo y aeródromos. Lo lógico es que un municipio de casi 100.000 habitantes disponga de una instalación de este tipo. En Europa así ocurre en cualquier ciudad. Por ejemplo en Portugal, sin ir más lejos, Castelo Branco y Viseu cuentan con aeródromos impresionantes, aunque la primera tenga 30.000 habitantes y la segunda no llegue a los 100.000. Pero en Cáceres hemos estado años a la cola, tan solo hay dos aeródromos en fincas privadas de Guadalupe y Monroy para uso particular.

--El aeródromo se ha diseñado con una pista de 1.600 metros, más 8.000 metros cuadrados para la plataforma de estacionamiento de aeronaves y otros 1.080 para un hangar de mantenimiento. ¿Es la solución que necesita Cáceres?

--La idea está muy bien planteada, porque hablar de aeropuerto internacional era absurdo, Cáceres no tiene capacidad para soportar una infraestructura de ese tipo. En cambio, el aeródromo tendrá las instalaciones mínimas que se necesitan y la pista se proyectará con vistas al futuro, de modo que si Cáceres va demandando más vuelos podría permitir directamente el aterrizaje de aviones de pasajeros de hasta 70 plazas. En ese caso habría que ir aumentando el resto de instalaciones, por lo que hablamos de un proyecto prudente que comienza con capacidad para aviones de ocho pasajeros pero con posibilidad de ir aumentando. Además, está a seis kilómetros del centro con un clima adecuado casi todo el año, incluso con un hotel al lado.

--La ciudad ha encadenado desde los años 70 varios proyectos de campos de vuelo, aeródromos y aeropuertos, que han volado hasta desaparecer. ¿Confía en que ahora sí será viable?

--Al menos no han echado las campanas al vuelo como cuando anunciaron el aeropuerto internacional. Entonces nos vendieron humo y por lo menos en esta ocasión sabemos que hay permiso, que hay presupuesto, que está todo gestionado y parece que va en serio, aunque no puedo evitar tener todavía alguna duda después de estos años. Tanto la Consejería de Fomento como la Diputación Provincial, la Subdelegación del Gobierno y el Ayuntamiento de Cáceres nos han prestado atención y han mostrado mucho interés en que el aeródromo sea una realidad.

--Entre tantos proyectos anteriores, usted se acabó llevando su escuela de vuelo a Córdoba...

--Estuvimos legalizados en La Cervera hasta 2005 para formar a pilotos de ultraligeros con su carnet correspondiente, pero en una inspección de las que hacían cada dos años para renovar la licencia de la escuela, detectaron que la autorización que nos había dado la Diputación para usar aquel espacio no era válida, porque el propietario era el Ministerio de Fomento. Conseguimos ir en 2007 con el presidente de la Diputación a un encuentro con el director general de Aviación Civil, pero no se hizo nada más y ya no podíamos volar en Cáceres. Por eso tuvimos que trasladarnos a Fuente Ovejuna.

--Curioso, también tiene la única empresa de construcción de ultraligeros en España, en la única provincia sin pista...

--Hacemos mantenimiento y trabajos de reparación y reconstrucción de aviones, y además fabricamos un modelo completamente metálico de última generación, llamado 'Storm'. El problema es probarlos, no hay pista autorizada en la provincia.

--Parece ser que le escribió al presidente Monago hace unos meses. ¿Fue para contarle todos estos problemas?

--Sí, la verdad es que cuando le envíe la carta ya se rumoreaba que podía haber un proyecto, pero nada claro. En ella le decía que era una lástima que una empresa como Andi Aeronáutica, creada con fondos europeos y con apoyo de la Sociedad de Fomento Industrial de Extremadura, que además es una firma de I+D+I, no tuviera la oportunidad de probar sus productos aquí.

--¿Qué usos podrá tener en principio el aeródromo?

--Desde el punto de vista turístico, han aumentado muchísimo los vuelos en aviones particulares. En España hay numerosos ultraligeros (ya convertidos en pequeños aviones) porque son muy cómodos de volar, gastan un poco más de gasolina que un coche pero con ese combustible hacen bastantes más kilómetros, su mantenimiento es similar al de los vehículos y te permiten disfrutar de cualquier destino durante un fin de semana. Ahora mismo el ultraligero ha superado a la avioneta porque necesita menos espacio, menos mantenimiento y es cuatro veces más barato en combustible. Cáceres podrá recibir esos visitantes. La ciudad está a menos de una hora de Madrid, a dos y media de Valencia, y cerca de cualquier destino nacional. El año pasado yo mismo me vine desde la Costa Azul francesa por la mañana, paré a repostar y a desayunar en Barcelona, y llegué a Cáceres para comer. Además, el aeródromo nos abrirá las puertas al turismo de congresos y potenciará el sector extremeño de la caza. Y hay que unirle los importantes usos deportivos.

--¿Los más destacados?

--Nos estamos perdiendo muchos eventos que no llegan a Cáceres, una ciudad con gran tirón turístico, por falta de aeródromo. El año pasado vinieron 40 aviones de la Vuelta a Portugal y tuvieron que hacer una escala muy muy restringida, y como ésta hemos tenido que rechazar otras citas con mucha gente. También recuperaremos el movimiento de la escuela de vuelo. Además, Cáceres es una zona privilegiada y hay clubes europeos de vuelo libre que vienen a batir records y que podrán contar con el aeródromo. También estamos quizás en el mejor lugar de España para vuelos sin motor y ahora no podemos aprovecharlo, nosotros mismos tenemos un velero parado por falta de instalaciones. Todo ello sin olvidar el Bellota Jet y otros eventos que podrán organizarse en el aeródromo.