La diputación ingresará más de 2,4 millones de euros (400 millones de pesetas) por la venta de los locales y pisos afectados por el traslado a las nuevas dependencias del Banco Simeón en el número 8 de la calle Pintores.
La operación inmobiliaria estrella del equipo de gobierno socialista supondrá un desembolso de más 6,1 millones de euros (1.027 millones de pesetas) a la entidad bancaria, con el fin de poder ubicar el archivo provincial y otros servicios de la institución en el emblemático edificio.
Ello obligará a la diputación a financiar el pago mediante una operación de crédito y a lograr ingresos procedentes de la enajenación de su propio patrimonio.
En esta dirección apuntó el pasado martes, tras la firma de las escrituras del nuevo inmueble, el presidente Juan Andrés Tovar quien aseguró que el proceso para la venta de los locales que ahora ocupan varios departamentos --la mayoría en la avenida de Hernán Cortés-- se iniciará durante el año 2004.
Según Tovar, en primer lugar hay que trasladar a la plantilla al edificio de Pintores "para que queden libres de cargas". Cuando esto ocurra, afirma el mandatario provincial, comenzarán los trámites burocráticos para vender estos inmuebles que ahora ocupan, entre otros, el patronato Pedro de Ibarra --denominado Organismo Autónomo de Desarrollo Local--, la Agencia Extremeña de Energía, el Boletín Oficial de la Provincia y el departamento de Formación.
Asimismo, el presidente de la diputación apuntó que es necesario cumplir "escrupulosamente un proceso administrativo" que consistirá en la valoración de los inmuebles para poder proceder a su venta, para lo cual es muy posible que la diputación utilice la fórmula de la subasta.
TRASLADO INMEDIATO La intención del equipo de gobierno es comenzar el traslado al edificio de Pintores durante el primer trimestre del 2004, aunque el acuerdo con el Banco Simeón establece que éste puede continuar en el inmueble hasta el 30 de junio de ese año. A pesar de ello, ambas partes expresaron su voluntad de iniciar el desalojo antes de lo previsto, por la premura de la diputación en dar una nueva ubicación al archivo provincial debido a sus malas condiciones de conservación.
La adquisición del edificio del Simeón se ha producido en un tiempo récord. Las negociaciones se iniciaron el pasado mes de septiembre tras la entrada del nuevo equipo de gobierno y fructificaron en noviembre.
A pesar de barajar ofertas de empresas privadas, la entidad bancaria apostó por la diputación por el uso público que tendrían las oficinas, con una extensión de más de 5.300 metros cuadrados repartidos en siete plantas. El buen estado de las instalaciones evitará acometer obras de envergadura para ubicar las dependencias provinciales.
