Unas dos mil solicitudes se han presentado al proceso de adjudicación de 169 viviendas de promoción pública construidas en el sector dos de La Mejostilla y en La Cañada, comentó el pasado viernes Basilia Pizarro, vicepresidenta del instituto municipal de Asuntos Sociales, que indicó que la cifra final podría ser algo superior. El plazo de entrega de las solicitudes se cerró hace una semana y la adjudicación se resolverá mediante un sorteo, ya que esta convocatoria está afectada por el decreto regional que se aprobó en junio del 2006.

Según se fija en el decreto, una vez resuelto el periodo para la admisión de las solicitudes, el ayuntamiento tiene de plazo dos meses para remitir a la Junta la relación de solicitantes admitidos, un plazo que se puede modificar por razones de urgencia y que para este proceso, según lo anunciado por la Junta en agosto, será de un mes. Tras la resolución de los recursos que se presenten, la dirección general de la Vivienda tendrá que publicar la lista definitiva de admitidos. El sorteo, público o ante notario, tendrá que anunciarse con una antelación de al menos tres días.

Las previsiones iniciales de la Junta eran que estuviesen adjudicadas antes de navidades, aunque ya lleva retraso, dado que el plazo para la entrega de las solicitudes se amplió 17 días. Las viviendas se adjudicarán en régimen de arrendamiento, aunque con la diferencia con respecto a otros procesos de que el titular podrá adquirir la vivienda transcurridos cinco años.

Cuando se entreguen las viviendas, llevarán edificadas más de dos años. Los 96 pisos del sector 2 de La Mejostilla están junto a otro bloque de cien pisos que se entregaron en septiembre del 2005, mientras que los 73 pisos de La Cañada se reparten en cuatro parcelas y se dividen entre 46 unifamiliares y 27 en un bloque.

El decreto excluye del proceso de adjudicación de las viviendas a aquellos demandantes que hayan sido condenados o tengan pendientes el cumplimiento de penas por delitos contra la salud pública y alteración del orden o que mantengan, de forma habitual, conductas asociales.