El Colegio de Médicos celebró ayer la festividad de su patrona, la Virgen del Perpetuo Socorro, con un entrañable encuentro que avivó el corporativismo y rindió numerosos homenajes. El más importante fue para Manuel Jiménez, que obtuvo el premio Fonendo por dedicar toda su carrera a Belvis de Monroy en sucesión de su padre. Además, numerosos facultativos ya jubilados recibieron el Botón de Oro : Emiliano Cobos, Delfín Hernández, Antonio Francisco Lozano, Carlos Marcos, Conrado Muñoz, Jesús Murillo, Serviliano Núñez, Gregorio Pantrigo, Agustín Ramos, Diego Rosado, José Antonio Vicente y Octavio Villar. Nombres sin duda muy conocidos en Cáceres.

El colectivo entregó becas de investigación a los doctores Carlos Disdier (Epoc) e Isaías Montes (artritis). Los nuevos colegiados realizaron el juramento hipocrático y también recibieron su insignia. El acto se completó con una conferencia sobre tabaco y un concierto a cargo de Irene Morato y Gerardo Valle.

ADIOS A PINTORES

Más homenajes. Los comerciantes de Pintores han organizado una fiesta en El Asador para despedir a un veterano de esta calle, Manuel Caballero, que se jubilará en breve. Comenzó como dependiente en la Relojería Alonso hasta que abrió una joyería propia en Camino Llano, más tarde en la plaza, después en San Pedro y por último en Pintores con el nombre de París (muy popular), hoy convertida en Regalos Manolo. El gremio le ha entregado una placa por su dedicación y compañerismo.

Y de Pintores nos vamos al Centro Cultural Capitol, de Caja Duero, que acoge desde ayer y hasta el 31 de julio la exposición fotográfica La tierra vista desde el cielo ", del fotógrafo Yann Arthus-Bertrand. El responsable de la Obra Social de la caja José María Asenjo recordó que la muestra ha estado en Barcelona.