La denuncia presentada por las asociaciones ecologistas Seo/BirdLife, Ecologistas en Acción y Adenex contra las edificaciones y parcelaciones realizadas en el paraje El Collado, en los Llanos de Cáceres y de Sierra de Fuentes, se basa en tres argumentos: es un delito contra la ordenación del territorio, se destruye un espacio natural y se comete un atentado contra la protección de la fauna.
UN DELITO CONTRA LA ORDENACION DEL TERRITORIO
El Plan General de Ordenación Urbana califica los Llanos de Cáceres como suelo no urbanizable de especial protección. Es uno de los parajes del término de Cáceres con más limitaciones para construir. El primer requisito es que la parcela donde se vaya a edificar tenga cien hectáreas (casi diez veces el parque del Rodeo) y sólo están autorizadas las edificaciones agrícolas. Sin embargo, en esta zona, según se especifica en la denuncia, se han hecho edificaciones residenciales para segunda vivienda y en parcelas de mil metros cuadrados (0,1 hectárea). El delito contra la ordenación del territorio está tipificado en el Código Penal. El motivo principal por el que los Llanos tienen una especial protección urbanística es su valor ecológico, que lo convierte en un soporte fundamental para la fauna, por lo que sólo se permiten usos que sean agrarios y ganaderos. Las asociaciones subrayan que las construcciones y parcelaciones se han hecho sin licencia, sin calificación urbanística y sin evaluación del impacto ambiental.
LA DESTRUCCION DE UN PARAJE NATURAL QUE ESTA PROTEGIDO
La denuncia no afecta a la totalidad de los Llanos, sino sólo al paraje denominado El Collado dentro del término de Cáceres, un espacio que está entre el cruce de Sierra de Fuentes, en la carretera de Miajadas, y el término municipal de Torreorgaz, y que forma parte de la Zona de Especial Protección de Aves (Zepa) de los Llanos, un enclave protegido por su hábitat. Las edificaciones y parcelaciones, según se afirma en la denuncia, se han hecho en un espacio de cría y reproducción de la avutarda. La población más numerosa de avutardas de la provincia de Cáceres habita en esta zona. Prueba de su importancia ambiental es que se desestimó que el trazado de la circunvalación de la autovía de Trujillo pasase por este sitio a pesar de que era la alternativa más barata y con más ventajas para desarrollar las infraestructuras de Cáceres.
UN PELIGRO PARA ESPECIES DE AVES AMENAZADAS
Las construcciones y parcelaciones impiden y dificultan la reproducción de la avutarda, que es una especie amenazada, según se matiza en la denuncia. Son actuaciones que contravienen las leyes y disposiciones de carácter general protectoras de las especies de fauna silvestre, un delito que también está tipificado en el Código Penal. El catálogo nacional de especies amenazadas define a la avutarda como un ave de interés especial.
