La línea de autobús del campus universitario será la primera que se vea afectada por la reestructuración prevista por el gobierno local para rentabilizar un servicio que es deficitario. La junta local de gobierno decidió ayer reducir a la mitad los vehículos que cubran este trayecto los viernes por la tarde y ahorrar de ese modo más de 31.000 euros al año. La medida está incluida en el estudio puesto en marcha esta semana para analizar el estado de las líneas de autobús, con la mirada puesta en una reestructuración del servicio previa a la que se planifique en la próxima concesión que deberá sacarse a concurso en dos años.

"Estamos haciendo un estudio para tratar de aumentar la eficiencia en las líneas de autobuses. Es una cuestión puramente económica y la intención es que el servicio no se vea afectado en exceso", señaló el portavoz del equipo de gobierno, Valentín Pacheco, sobre los cambios que se prevén en el entramado de líneas del servicio de autobús urbano.

La primera medida consiste en la supresión de tres turnos los viernes por la tarde en la línea que va al campus, que cubre el trayecto entre al la plaza de América y el campus universitario de lunes a viernes en horario ininterrumpido de siete de la mañana a once de la noche. Esta línea cuenta ahora con seis autobuses articulados durante toda su jornada, que pasan con una frecuencia de siete minutos. Con el cambio el número de vehículos se reducirá a la mitad y la frecuencia de paso se duplicará, pasando de siete a 14 minutos.

"Los estudios nos demuestran que en los últimos años se ha producido una disminución más que notable en la actividad del campus, especialmente el viernes por la tarde. Y es evidente que eso ha influido en el coste del servicio", valoró Pacheco sobre las razones que han determinado que la línea que va al complejo universitario sea la primera afectada por el recorte. De hecho, mientras que en el año 2004 se registraron más de 1.317.794 viajeros en esa línea, en el 2010, la cifra se redujo a 1.059.574; en total 200.000 viajeros menos.

TRAMITACIÓN

Aunque la medida se presentó ayer, no se hará efectiva hasta que se termine el trámite administrativo, puesto que debe pasar por la comisión correspondiente. En todo caso sí que será la primera que se lleve a efecto, por lo que el ayuntamiento quiere además poner en marcha una campaña de información en el campus.

"No se trata solo de ver qué línea se suprime y cómo sino de ver sobre plano los recorridos que se ven afectados", dijo el portavoz del gobierno, que confirmó que el reajuste del servicio de autobús urbano irá más allá. De hecho, Pacheco concretó que otra de las líneas que se verá afectada será la del autobús nocturno, otro de los afectados por la pérdida de viajeros de los últimos años. Por el momento no se contempla suprimir la línea, pero sí llevar a cabo un recorte que podría afectar igualmente a la frecuencia de paso de los vehículos.

La propuesta completa se desarrollará a lo largo de la próxima semana, de conformidad con los técnicos municipales y afectará a más líneas, incluidas las que han entrado en funcionamiento recientemente. "No se va a quitar nada, pero sí es cierto que no se puede ampliar más una línea en una urbanización en la que hay tres o cuatro usuarios", señaló Pacheco sobre las reivindicaciones de los nuevos barrios periféricos, para que se instalen más paradas de autobús.

También queda en suspenso la ampliación de la línea 3 prevista para llegar al nuevo hospital, al menos hasta que haya una fecha para la apertura del mismo.