Trabajadores de Renfe denunciaron ayer a este diario los sabotajes que se vienen produciendo desde el pasado verano en la línea férrea Cáceres-Valencia de Alcántara a su paso por las cercanías de Aldea Moret. Aunque la compañía ferroviaria negó ayer cualquier anomalía en la vía, empleados de Renfe aseguraron que el último incidente se produjo en la madrugada del pasado lunes cuando el tren Lusitania, que cubría el trayecto Madrid-Lisboa, tuvo que sufrir una parada de varios minutos tras llevarse por delante una rueda.

Sin embargo, Renfe aseguró ayer que no le constaba incidencia alguna en el servicio, estas mismas fuentes confirmaron a EL PERIODICO que el sabotaje se produjo a la altura de un paso a nivel sin barreras, situado a menos de 100 metros del paso a nivel con barreras de Aldea Moret. Añadieron que esta zona se encuentra sin vallar, por lo que el acceso para colocar enseres en la vía es relativamente fácil.

El tren, que partió de la estación de Cáceres poco después de las tres de la madrugada del lunes, se vio afectado en la parte inferior de la máquina, concretamente en un dispositivo que mide el nivel del tanque de gasoil.

REVISION DE DAÑOS En la parada realizada tras sufrir el impacto con la rueda, el maquinista tuvo que utilizar una llave de paso para evitar la pérdida de combustible. Posteriormente, realizó otra parada en la estación de Arroyo-Malpartida donde, tras verificar que el convoy no había sufrido daños de importancia, continúo su camino hacia la capital portuguesa.