Esta vez le ha tocado a Memacar, una empresa dedicada a la venta y reparación de automóviles que hay en Las Capellanías. Los hechos sucedieron a las cuatro de la madrugada del sábado al domingo cuando uno o varios individuos fracturaron de forma violenta la puerta de entrada y uno de los cristales del escaparate del concesionario, según informó uno de los copropietarios del negocio a este diario.
Una vez dentro los presuntos autores únicamente lograron apoderarse de unos casetes y una máquina de fotos que había en una mesa. Todo parece indicar que cuando se encontraban en el interior saltó la alarma y no les dio tiempo a nada más.
Fueron agentes del Cuerpo Nacional de Policía quienes alertaron de lo ocurrido a los dueños del negocio, que se personaron en el lugar de los hechos. El copropietario mostró su sorpresa tras lo ocurrido porque, según indicó, "el negocio está muy de cara a la carretera y parece complicado perpetrar un robo". Explicó que un día antes de lo sucedido acudió al establecimiento un hombre en actitud sospechosa que "vino --indicó-- a informarse de una venta".
Respecto a la cuantía de los daños, desde Momacar no supieron precisar el importe exacto, pero indicaron que los desperfectos han sido cuantiosos. La empresa se dedica a la venta de coches de gama media alta. El copropietario de la empresa explicó que en BMW también habían intentado acceder.
Fuentes de la Policía Nacional de Cáceres dijeron ayer a este periódico que aunque todas las líneas de investigación están abiertas, los autores podrían ser delincuentes habituales y que, a juzgar por los hechos, no parece que pertenezcan a una banda organizada.
