Atento, filial de telefónica, declaró ayer a EL PERIODICO EXTREMADURA que no tiene previsto cerrar su plataforma en la capital cacereña, más bien al contrario. "Existe una vocación de permanencia absoluta y el centro irá a más", subrayó la empresa a través de su departamento de comunicación, sorprendida ante las declaraciones menos optimistas de los representantes sindicales de UGT.

La compañía reconoce los problemas que atraviesa el sector, y asegura que por esta razón sus ajustes intentan causar el menor daño posible. El servicio 1003, por ejemplo, registró unas pérdidas del 20% entre enero y abril. "Tenemos 8.500 trabajadores y debemos velar por ellos. Siempre hemos optado por perjudicar lo menos posible a Cáceres frente a otras ciudades debido a que la alternativa de empleo es más difícil", señalaron los responsables de comunicación.

También declararon que la empresa mantiene en pie su propósito de incorporar nuevos servicios a la plataforma. La ampliación del servicio CAU IP (atención ADSL), según anunciaron, está en negociaciones.