José Cantero Valle fue cocinero antes que fraile, agente comercial antes que dueño de un establecimiento de alimentación en la calle Roso de Luna en el que nadie se siente forastero. Pero además, Pepe Cantero es cantaor de flamenco y hermano de "bastantes cofradías" penitenciales. En la Sagrada Cena formó en 1997 la banda de cornetas y tambores. Sus integrantes tienen 16 años de media y han recibido numerosos premios nacionales. Cantero ha sido su director hasta el pasado mes de octubre.

¿Cómo logro que muchachos jóvenes se interesasen por formar parte de una banda de cornetas y tambores?

--Todos los chicos empezaron allí. Al principio, ninguno sabía lo que era un juego de maquetas, una corneta o una trompeta.

¿Qué necesita la banda?

--Necesita actuaciones. Hemos llamado a la puerta de las cajas, pero para esto no hay nada, aunque es una actividad cultural. Sí nos ayuda el ayuntamiento.

¿Hay mucha afición al cante flamenco en Cáceres?

--Hay mucha afición, y muy buenos cantaores flamenco.

¿Están reconocidos?

--Sí, pero a nivel de la calle.

¿Qué es más difícil, estar detrás o ante el mostrador?

--En los dos sitios hay que saber torear de izquierda.