Al parecer ningún partido tiene encuestas sobre los resultados de las elecciones municipales. Nadie se lo cree, naturalmente. Como no pueden hablar de encuestas, te cuentan sus impresiones personales . Y así he llegado a la conclusión de que hay al menos dos encuestas con algunas variaciones, aunque ponen de manifiesto lo complicado que resulta adelantar vaticinios en estas elecciones.

Una pronostica 13 concejales a los populares, 11 a los socialistas, uno a Extremadura Unida y otro, con dudas, a IU.

La otra concede 12-11 al PSOE, 12-11 a los populares, uno a los regionalistas y otro a Izquierda Unida. De manera que no hay tantas diferencias. Parece claro que desciende el PP, suben los socialistas, se confirma Antonio Población e IU no saca fruto a la protesta contra la guerra de Irak.

Parece que sí sube Extremadura Unida y lo hará a costa del PP, como siempre ha sucedido y eso le puede costar a Saponi dos concejales, aunque los regionalistas solamente saquen uno, lo que se da como seguro. A ello hay que añadir el natural desgaste del partido en el gobierno y la incógnita de cómo afectarán la guerra y el chapapote.

Quizás la clave de la mayoría absoluta esté en manos de los votos de los jóvenes y su reacción electoral ante el botellón y la guerra.

Si fueran necesarios los pactos, nadie da por seguro que Izquierda Unida facilite el camino a Carmen Heras si hacen más caso al talante de Cañada que al de Llamazares. La postura de Población es imposible de adivinar, aunque la de su partido no diferiría mucho de la adoptada en otras ocasiones.

Los programas parecen no importar y la culpa es de los partidos, que prometen mucho y luego no cumplen, pese a lo diga el eslogan.