"Detrás de una lista de demandantes de viviendas hay personas. Yo necesito una vivienda estable, y no llegar a final de mes pensando si te llega para pagar el alquiler. Al igual que yo hay muchos, incluso en peor situación. No te pueden dar la esperanza de que vas a tener tu vivienda, y que de la noche a la mañana te la quiten", cuenta Raquel Martín, de 36 años, separada, con dos niñas a su cargo y que es uno de los cuatro mil demandantes de viviendas que el pasado otoño se apuntaron a la promoción de 2.400 pisos del programa especial de 60.000 euros que se proyecta en la finca de Mejostilla de Espadero.

Entre los peticionarios existe inquietud, dado que las obras se anunciaron para el verano, "y es que todavía no está ni aprobada, y es que además no sabemos nada, dijeron que en primavera empezaban a llamar a la gente, y todavía nada", explica Oscar Hernández, soltero de 30 años, que vive con sus padres porque "aunque estoy trabajando, el contrato que tengo no es para meterse en un piso, y además al precio al que están".

En la última semana se han producido dos novedades significativas. La primera es la presentación del primer gran PIR (Proyecto de Interés Regional) que se desarrolla en Extremadura, que está a unos 9 kilómetros del centro urbano de Badajoz, con un volumen importante de pisos del programa especial, a un precio de 60.000 euros. Serán 1.746 en una urbanización de 2.750 viviendas.

La segunda es la aprobación definitiva por el pleno del ayuntamiento de la cesión de tres parcelas para la construcción de 237 viviendas del programa especial. Una cesión que se hace a la empresa pública de gestión de Infraestructura, Suelo y Viviendas de Extremadura, y que se podrían iniciar tras el verano, aunque la fecha dependerá de la ejecución de las obras de urbanización, ya que los polígonos en los que se entrega el suelo (Maltravieso, Casa Plata y Ronda) están ahora en la fase de ejecución de viales, calles y servicios.

De la otra promoción anunciada en Cáceres, con un PIR que no está definitivamente aprobado, hay 2.400 de 60.000 euros en una urbanización proyectada con 3.968 pisos. Desde la Agencia Extremeña de la Vivienda se asegura que el retraso no debe interpretarse como una negativa al desarrollo de esta actuación, sino que es necesario disponer de todas las autorizaciones para su aprobación final.

De la concreción de esa oferta de viviendas de 60.000 euros en Cáceres está pendiente Juan Carlos Campón, de 34 años, que paga una pensión alimenticia y que vive de alquiler. "He ido varias veces a la cuarta planta del Múltiple --donde están los servicios territoriales de la Junta de Extremadura--, y me dicen que no saben nada. Si tuviera diez millones --de pesetas-- sí miraba otra cosa, pero como no los tengo, debo limitarme a pagar el alquiler y a vivir como pueda".

De ilusión a desencanto

"Pero es que no sólo es que la vivienda de renta libre tenga un precio elevado, sino que quieres comprar una vivienda de protección oficial y te dicen en las constructoras que no hay o te encuentras con muchos apuntados", asegura Miguel Angel Agúndez, de 29 años, casado, con una niña y que vive en casa de sus padres. "Tengo un trabajo eventual, y los bancos, como no tengas una buena nómina, te dicen que no pueden".

Miguel Angel Agúndez se apuntó a las viviendas del programa especial de 60.000 euros "con bastante optimismo, se hizo mucha publicidad y después es como si no existiera, por lo menos queremos una respuesta con una fecha concreta porque te acabas desesperando".

La misma preocupación tiene Raquel Martín: "Estaba muy ilusionada, mi hija de 16 años me decía ´mamá, vamos a tener una vivienda´, pero la sensación que te queda es que están jugando con tus sentimientos".

Isabel Cerrudo, de 25 años, pensaba que "iba a ser más rápido". "Mi novio y yo llevamos tiempo detrás de una vivienda, no me quiero casar sin tener nada, pero son caras". Reconoce que está inquieta porque "tengo ganas de meterme en algo, pero los pisos suben cada vez más, y al final me tendré que meter en algo en lo que, realmente, sabes que no puedes por su precio".

Para Vicenta Manso, soltera de 23 años, adquirir una vivienda de renta libre "no puede ser con mi sueldo, no puedo juntar para un piso, pero es que esto --la promoción de viviendas de 60.000 euros-- va para rato, he estado mirando otros pisos, pero es que no puedo meterme".

"No pueden poner los pisos a precio de Madrid, y con sueldos de Cáceres", opina Juan Luis Barrantes, de 29 años, discapacitado que vive con sus padres, quien, cuando el pasado otoño se anunció el PIR de Mejostilla, "pensé en una casa, y ahora me da qué pensar; en Badajoz lo tienen y aquí no sabemos nada", pero no solo le preocupa el retraso, también, al igual que a todos, el sistema de selección entre los demandantes, "que lo vigilen, que han dado vivienda a quien ya la tiene".

José Miguel Hidalgo, de 27 años y soltero, vive de alquiler, cree que las viviendas "se harán, pero no tantas como dicen", y además piensa que "irá lento, creo que dos o tres años". "No veo interés en la Junta --afirma--, y me preocupa porque no puedo llegar a un piso de renta libre".

José Daniel Flores, de 21 años y que vive con sus padres, tampoco puede acceder a un piso de renta libre por su precio. Le preocupa el retraso. "Me apunté con ilusión, siempre pensé que iba a ser más rápido para empezar a hacer mi vida. Pero los esquemas que hice están ya medio rotos" .