Una de las propuestas ya anunciadas, pero que figura entre las más destacadas del nuevo plan general, es que proyecta el traslado de la actual estación de trenes. Ayer se adelantó cual es el destino que se prevé para toda esta instalación, que se pretende recuperar para la creación de un equipamiento cultural. Esta intervención, que permitirá el desarrollo urbano por el oeste de Cáceres al desaparecer la vía del ferrocarril, se completa con la planificación en esta zona de la ciudad de dos nuevas áreas verdes: el parque del cerro de los Pinos y la dehesa del Junquillo.

No obstante, los nuevos objetivos para el oeste urbano no tienen una fecha concreta para su realización, ya que dependerá de la llegada del Ave a Cáceres. Lo que hace el nuevo plan es facilitarlo con la creación de un corredor que va de norte a sur y que queda para la nueva red ferroviaria y la autovía de la Plata y que se convierte en el límite del casco urbano por su lado oeste.

Junto a este corredor, en el nuevo suelo urbanizable que se crea entre la carretera de Malpartida y la N-630 (al oeste y rodeando Capellanías), se sitúa la cuarta área de reparto para nuevos usos comerciales e industriales y las nuevas estaciones de trenes y autobuses, junto a la N-521, y de mercancías, al norte. En esta área se prevé la creación de 3,5 millones de metros cuadrados edificables para usos industriales y terciarios, y a esta área se adscriben 74 hectáreas que el ayuntamiento obtendría para la zona verde de Sierrilla.

Esta actuación se prevé para un plazo no superior a 25 años. Más prioridad se da a la ampliación del ferial, que estaría entre las cesiones de suelo de los primeros sectores residenciales a desarrollar, y la obtención por el ayuntamiento de los terrenos para la zona verde de la Montaña y lo que queda por obtener de la ronda este, que también se adscriben a estos sectores.