Una de las últimas carreteras urbanas que el Estado transfirió al ayuntamiento fue la avenida Ruta de la Plata (antigua N-630). De aquel traspaso de competencias, el Gobierno central adeuda aún al ayuntamiento alrededor de 200.000 euros (unos 33 millones de pesetas) para la ejecución de las obras de jardinería, una mejora que está pendiente de realizar, según recordó el alcalde en funciones, Joaquín Rumbo de la Montaña.

La entrega a los ayuntamientos de estos viales urbanos de la Red de Carreteras del Estado está regulada por la orden ministerial del 23 de julio del 2001. La dotación económica que acompaña el traspaso es de 180.000 euros por kilómetro de tramo de una calza y 300.000/km en dos calzadas. En los ocho tramos cacereños, sólo dos son de dos calzadas: la prolongación de Virgen de Guadalupe y el de la avenida de la Hispanidad.