El incendio convirtió la avenida Virgen de la Montaña en un caos. Aunque el trabajo de los agentes de la policía local para regular el tráfico, y de la nacional para controlar a los peatones, fue encomiable, los problemas de circulación y la preocupación de los propietarios de los negocios próximos al local siniestrado fueron inevitables.

Los numerosos camiones de bomberos y coches policiales que invadieron la calzada desde la sede de la Subdelegación del Gobierno hasta el cruce con la avenida de España convirtió Virgen de la Montaña en un tapón que dificultó el tránsito de vehículos. La circulación se vio seriamente afectada en toda la zona de Cánovas.

Y mientras los agentes se esforzaban por hacer lo más fluida posible la circulación y controlar a los numerosos curiosos que se agolparon en la zona, las autoridades fueron llegando. El alcalde, José María Saponi, y los concejales de Seguridad y Obras, Santos Parra y Joaquín Rumbo, tranquilizaban a través de los medios de comunicación. "Ha podido ser grave, pero la rápida actuación de los bomberos lo ha evitado. Todo está ya controlado y aunque habrá daños materiales, lo importante es que no hay que lamentar heridos", señalaban al unísono.

Pero a los directamente afectados, duñeos y empleados de los negocios que ocupan la docena de locales existentes en el pasaje Norba y aledaños, nadie pudo quitarles la procupación. "Esto es un auténtico desastre" era la opinión generalizada. La dueña de la peluquería Wluyesi, de la tienda de moda y complementos Milonga, de las numerosas oficinas, de las tiendas de Telefonía, de la Inmobiliaria..., todos se mostraban conscientes de que los daños serán importantes. "El fuego no ha llegado a otros locales, pero sí el humo, y éste dejará toda la ropa y otros materiales para tirar".

Preocupada se mostraba también Inmaculada, responsable de la Sala de Exposiciones que Caja Extremadura tiene en el pasaje y que acoge obras de Vega Ossorio. La entidad enviaba por la tarde un comunicado informando que "los cuadros no han sufrido ningún desperfecto, el hollín producido por el intenso humo sólo ha afectado al local".